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“LA LUCHA CONTRA EL CASTROCHAVISMO DEBE REDOBLARSE EN EL PERÚ”

El general José Baella afirma que el país debe estar atento ante la advertencia del diputado boliviano José Carlos Gutiérrez sobre el complot de Evo Morales y Luis Arce, cuyo objetivo es convertirnos en un narcoestado bajo la órbita comunista. 

Las intenciones del exgobernante boliviano Evo Morales, como operador político del Grupo de Puebla, era respaldar políticamente al hoy preso expresidente Pedro Castillo, para desestabilizar la democracia y hacer del país un narcoestado, siguiendo el modelo castrochavista” dijo el general José Baella, quien comandó a la policía antiterrorista.

El exjefe policial hizo esta apreciación al comentar la denuncia del diputado boliviano José Carlos Gutiérrez, de la Alianza Creemos, quien acusó Morales Ayma y al presidente actual, Luis Arce Cotacora, de armar un complot contra el Perú.

Gutiérrez Vargas hizo esta denuncia en el marco de la última jornada del II Encuentro regional del Foro Madrid, desarrollado recientemente en Lima, al señalar que la lucha del Perú contra el castrochavismo desestabilizador todavía no ha terminado y más bien debe redoblarse.

El político boliviano señaló que este complot contra el Perú, organizado por Morales y Arce traería como consecuencias confrontación y desinformación sobre la coyuntura de nuestro país.

En este sentido, advirtió que el plan desestabilizador e injerencista de los políticos bolivianos tiene como objetivo el fortalecimiento del Foro de Sao Paulo cuyo objetivo es generar mayor inestabilidad política en el continente para facilitar la aplicación del modelo castrochavista.

Antes, en uno de sus comentarios electrónicos, Gutiérrez señaló que la extrema izquierda corrupta y mafiosa, representada muy bien por “el patrón del Chapare” (Evo Morales) adoctrina en el odio a nuestros niños, por eso “eso tenemos a tantos resentidos en Bolivia”.

Los discursos racistas –enmarcados en la ‘lucha de clases’, bajo la óptica del marxismo leninismo- sigue generando duros enfrentamientos, especialmente en Puno, que lleva a un sector de la población crea que la solución es que los aimaras formen parte de Bolivia.

Finalmente, Gutiérrez se refirió al encarcelamiento de la expresidenta boliviana, Jeanine Añez, y lanzó duras críticas a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por esperar dos años para visitar a la exmandataria y revisar las condiciones de su reclusión

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