EL ENEMIGO DE MIS ENEMIGOS, MI AMIGO ES
Ya estuvo bueno, la crítica, la sátira y demás adjetivos en contra de los que se equivocaron de buena fe, al votar por Castillo/Cerron, los que votaron en blanco o sencillamente no fueron a votar. Llego el momento de voltear la página sin resentimientos y unirnos en el presente en defensa de un futuro libre y democrático.

En el amplio espectro constitucional, caben válida y legítimamente, posiciones de izquierda democrática, centro, derecha social cristiana y derecha liberal, en esta grave circunstancia nadie sobra.
Cuando pongamos todos juntos a buen recaudo la democracia del país y derrotemos en unidad las pretensiones comunistas y autoritarias, podremos legítimamente hacer gala de nuestras diferencias y luchar por el poder conquistando la voluntad del electorado.
Cuando la patria, la democracia, la libertad y el futuro de nuestros hijos, está en peligro no hay espacio para mezquindades ni diferencias superfluas, es momento de unidad, con convicción, perseverancia y hermandad en la lucha, por objetivos comunes.Llego el momento histórico donde todos los demócratas, independientemente de sus diferencias ideológicas y programáticas rememos en el mismo sentido.
Esperemos con patriotismo que se unan a la lucha, los dignos, los anti fujimoristas, los caviares, los pulpines, la generación del bicentenario, etc. Los esperamos con los brazos abiertos, más aún los necesitamos, sólo sumando fuerzas lograremos salvar al Peru, del comunismo demoledor.
Es momento de reconciliación, requerimos que los jóvenes se unan y salgan a las calles, con su fuerza y determinación, luchando por su futuro.