MARRUECOS/ Deslumbra al mundo con su nuevo estadio: lujo, identidad y récord para el Mundial 2030
Rabat se ha convertido en el epicentro de la ilusión marroquí. Recientemente, en ocasión del partido entre Marruecos y Níger por las eliminatorias africanas rumbo al Mundial 2026, se inauguró oficialmente el nuevo Estadio Príncipe Moulay Abdellah, una joya arquitectónica que no solo representa el orgullo nacional, sino también la ambición continental de Marruecos como coanfitrión del Mundial 2030, junto a España y Portugal.
La ceremonia oficial fue precedida por una preinauguración privada el jueves 4, en la que el Príncipe Heredero Moulay El Hassan rindió homenaje a los obreros que participaron en la obra. “Este estadio es de todos”
Con capacidad para 68.700 espectadores, todos sentados como exige la FIFA, el estadio fue reconstruido desde cero en tiempo récord: las obras comenzaron en 2023 y finalizaron a mediados de 2025, estableciendo un récord Guinness como la construcción más rápida de un complejo deportivo de su tipo en África.
Una obra monumental con alma marroquí
La fachada del estadio, inspirada en hojas de palmera, fusiona modernidad con identidad cultural. El césped híbrido .combinación de hierba natural y fibras sintéticas- es el primero de su tipo en el continente, y garantiza drenaje, resistencia y rendimiento de nivel mundial.
El complejo cuenta con 17 puertas de ingreso, 110 palcos VIP/VVIP, cinco salas de hospitalidad, prensa internacional, vestuarios ergonómicos, accesos para personas con movilidad reducida y estacionamiento para más de 5.200 vehículos.
En los alrededores, se han construido esplanadas que permiten la estancia de más de 20.000 personas, y se ha optimizado la infraestructura vial con nuevas autopistas, expansión del tranvía Rabat–Salé–Témara, y un tren de alta velocidad que conectará la capital con ciudades clave como Marrakech y Agadir. Además, se proyecta un nuevo aeropuerto internacional para recibir a miles de visitantes durante la Copa del Mundo.
La ceremonia oficial fue precedida por una preinauguración privada el jueves 4, en la que el Príncipe Heredero Moulay El Hassan rindió homenaje a los obreros que participaron en la obra. “Este estadio es de todos”, expresó al saludar personalmente a los trabajadores.
Lo acompañaron el ministro de Educación Nacional, Preescolar y Deportes, Saad Berrada; el presidente de la Real Federación Marroquí de Fútbol, Fouzi Lekjaa; el Wali de Rabat-Salé-Kenitra, Mohamed El Yaakoubi; y figuras del deporte como Zinedine Zidane.
El estadio Príncipe Moulay Abdellah se postula como sede de una de las semifinales del Mundial 2030, y será también protagonista de la Copa Africana de Naciones 2025, que comenzará el 21 de diciembre con el partido inaugural entre Marruecos y Comoras.
La Real Federación Marroquí de Fútbol ha completado ya más del 70 % de las instalaciones mínimas requeridas por la FIFA, y continúa trabajando en otros megaproyectos como el Estadio Hassan II en Casablanca, que tendrá una capacidad de 115.000 espectadores, posicionándolo entre los cinco más grandes del mundo.
Un estadio que huele a futuro
El partido inaugural ante Níger fue más que una victoria deportiva: fue la presentación en sociedad de una infraestructura que simboliza el renacimiento del fútbol marroquí. Las entradas populares costaban apenas 10 dólares, mientras que los palcos VIP alcanzaban los 2.000.
Marruecos no solo sueña con el Mundial 2026. Ya vive el 2030. Y lo hace con estadios que no solo impresionan por su lujo, sino por su capacidad de integrar tecnología, cultura y emoción en una sola estructura. El Príncipe Moulay Abdellah no es solo un estadio: es una declaración de intenciones.