CRISIS MIGRATORIA EN LA FRONTERA SUR ¿CUÁL ES EL NORTE?
Escribe: Dra. Frieda Roxana del Águila Tuesta (*)
debemos confeccionar planes viables en el que se garanticen el irrestricto respeto a nuestra soberanía, a los Derechos Humanos del inmigrante y al cumplimiento de los compromisos asumidos por ambos países en los Acuerdos y Convenios Internacionales
La actual crisis migratoria en la frontera sur, nos obliga a reparar sobre los beneficios del Acuerdo Binacional suscrito con Chile (aunar esfuerzos en aras de preservar la soberanía y sus derechos en el Pacífico; reconocimiento recíproco entre los Poderes Ejecutivos en sus relaciones internacionales; fortalecimiento de la Alianza del Pacífico y el Foro para el Progreso de América del Sur – Prosur; además, de cinco ejes principales, lográndose 160 medidas que facilitan el comercio, mejora de infraestructura fronteriza e implementación de procedimientos eficientes de control integrado, optimizando el flujo operacional y tiempos de atención de pasajeros, vehículos y carga en frontera); pero además incluir el tratamiento y responsabilidades en relación a la migración forzada[1], porque de no definirla podría desencadenar una serie de conflictos de impacto regional.
Los Centros Binacionales de Atención en Frontera – CEBAF, en Chacalluta, Arica Chile y en Santa Rosa, Tacna, Perú, están regulados por la Decisión 502 de la Comunidad Andina; sin embargo, con la intempestiva salida de Chile hacia Perú de 200 extranjeros indocumentados, en su mayoría naturales de Venezuela, “sin autorización de ingreso a nuestro territorio” ha desencadenado el desconcierto y caos al haberse presentado hace dos semanas, sin que a la fecha se con solución alguna; acentuándose el descontrol y enfrentamiento por la crudeza y daños de diversa índole, que implica el pernotar en la intemperie sin acceso a los servicios básicos; en un escenario político nacional totalmente desfavorable.
Entre las propuestas planteadas por autoridades, políticos, etc. tenemos:
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a) Establecer un corredor humanitario hasta Venezuela, con la participación activa de Ecuador y Colombia; b) Crear un albergue en la línea fronteriza; c) Coordinar con Venezuela para el envío de su flota aérea para el retorno; d) Permitir el control de ingreso a nuestro país para su subsecuente regularización de estadía, lo que traería consigo consecuencias en las políticas migratorias internas de ambos países, al aparentemente desconocerse el relacionamiento y entendimiento compartido entre países soberanos; pero, que, en ningún caso, garantiza que los inmigrantes accedan pasivamente a estas medidas y que esta situación no se repita.
Debemos en todo momento considerar que estamos frente a una inmigración forzada (han huido a causa de la represión, inseguridad, alta tasa de crimines violentos, hambruna, etc.) muchos de ellos son considerados vulnerables (niños con sus padres, niños no acompañados, gestantes, enfermos, discapacitados, ancianos) y no todos son venezolanos; por lo que el encontrar solución está requiriendo de tiempo y especial logística para el desplazamiento[2] por la porosidad fronteriza y posible retorno;
El diagnóstico y empadronamiento para su identificación, son los primeros pasos que permitirán evaluar minuciosamente cada caso. Estamos en una encrucijada y por ello la determinación de acciones traerá consigo consecuencias, que de ser facilistas, pudiesen ser desfavorables en un futuro próximo, en la que nuestra seguridad, el control y la soberanía nacional pudiesen verse sentidamente afectadas.
Las medidas de presencia militar (formada para otros escenarios) ante el descontrol y el declarar la emergencia, quizá como supuesto acto persuasivo, podría considerarse excesivo y ubicarnos en una posición equívoca ante la mirada internacional, más aún si fuese azuzado por grupos desestabilizadores internos o externos de ultra izquierda; pese a que se determinase el retorno al su país, puesto que es justamente el lugar del cual huyeron.
Esta compleja y cruda realidad de la migración forzada, cuyo rechazo se ha acentuado por la inseguridad caótica a raíz de los crueles eventos criminales han generado el rechazo social y la crítica abierta por la aparente debilidad en el resguardo fronterizo y control interno. Por tanto, esta crisis en la frontera sur, representa una importante oportunidad para recrear soluciones estratégicas y efectivas, que no admiten mayor demora.
Es cierto que el Acuerdo Binacional con Chile contempla la coordinación previa entre países y por ende su aprobación en casos especiales, indistintamente de las preferencias de los indocumentados; por lo que sin perjuicio de las soluciones que se opten, a raíz de los hechos, estas determinaciones inconsultas podrían consistir en intromisiones que para preservar la paz entre países hermanos, los alcances de estas acciones deberán discutirse en el Fuero Internacional competente y en el más breve plazo; de soslayarlo en este contexto político, este “ensayo” podría implicar la admisión de una restricción a nuestra soberanía y el inminente peligro y con mayor voracidad, que se repita en todas nuestras líneas de frontera.
además, de aplicarse las sanciones propias a los gobiernos que hayan provocado el disentimiento de acuerdos, pero con mayor énfasis, aquellos que hayan generado sin causa justificable, un abominable éxodo
En este panorama, debemos confeccionar planes viables en el que se garanticen el irrestricto respeto a nuestra soberanía, a los Derechos Humanos del inmigrante y al cumplimiento de los compromisos asumidos por ambos países en los Acuerdos y Convenios Internacionales; y, deba requerirse la participación de Corte Interamericana, Organización de Estados Americanos, Organización de Naciones Unidas; etc., para la fidelidad de cumplimiento y paz general; además, de aplicarse las sanciones propias a los gobiernos que hayan provocado el disentimiento de acuerdos, pero con mayor énfasis, aquellos que hayan generado sin causa justificable, un abominable éxodo, coadyuvando así a una solución ejemplar e integral.
En consecuencia, sometemos algunas ideas generales, que podrían ser contempladas, como una propuesta al tratamiento migratorio, para lo cual acentuamos aquellos que resultan prioritarios mencionamos en los siete ítems siguientes:
El inmigrante indocumentado
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Diagnosticar sobre los beneficios de crear un albergue en la zona fronteriza, sin que ello se convierta en un “campamento de refugiados”.
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Identificar a través del empadronamiento biométrico de cada uno de ellos y su historial personal, médico, entre otros.
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Realizar una selección del grupo expuesto, tomando en consideración su condición de vulnerabilidad.
Normatividad
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Crear la Secretaría General de Gestión Fronteriza ubicándola en La Estructura Orgánica de la Presidencia del Consejo de Ministros, para una dirección del más alto nivel y que a su vez dirija la Mesa Multisectorial; incorporando en ella a los gobiernos regionales y locales, sociedad empresarial y sociedad civil representativa, para brindar soluciones inmediatas.
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Formular la Política Nacional Migratoria efectiva con planes de control fronterizo, tratamiento de regularización, depuración, fiscalización y sancionadores, que deban ser periódicamente revisados y actualizados.
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Modificar el Decreto Supremo Nro. 015-2017, facultando al Ministerio del Interior como sector, su tratamiento y dirección, tal como lo establece el Decreto Legislativo 1350.
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Incorporar en el Proyecto de Amnistía, que son sujetos pasibles de expulsión aquellos quienes por voluntad propia No se acogen a la regularización migratoria durante el periodo de excepcionalidad, siendo que la resistencia de esta orden será tomada como una obstrucción al orden interno y la seguridad nacional.
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Encrudecer la sanción como delictiva de aquellos que promueven o colaboran con la llegada irregular, estancia, etc. de extranjeros indocumentados al país, máxime si tienen conocimiento de sus antecedentes criminales.
Coordinación de Control Interno
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Implementar oficinas de análisis dentro de la Superintendencia Nacional de Migraciones que reporte al Ministerio del Interior las medidas migratorias internacionales que pudieran impactar en el país y analizar las noticias de la movilidad humana (causas, efectos y recomendaciones).
Acuerdos Internacionales
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Evaluar y reforzar las acciones de la política internacional sobre la inmigración forzada (en sus diferentes modalidades), determinando la responsabilidad conjunta e individual.
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Revisión de los alcances de los Acuerdos Binacionales con los países fronterizos.
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Incorporar en los acuerdos Binacionales, de la medida sancionadora administrativa de la Expulsión inmediata de aquella persona que es requerida por un país fronterizo sólo si se hubiese cometido un delito punible.
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Declarar la existencia de aspectos excepcionales de vulnerabilidad y tratamiento directo interno del país donde se encuentra el inmigrante. auxiliadas por las organizaciones internacionales para las migraciones de la ONU, fundaciones, asociaciones, Sociedad civil, que garanticen el respeto por los derechos humanos de los extranjeros indocumentados.
Comunicación, Información y Difusión.
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Impulsar la difusión de las acciones de ayuda que el país ha asumido.
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Fomentar el trabajo de sensibilización para la aceptación de los inmigrantes autorizados a permanecer o residir en nuestro país.
Fortalecimiento tecnológico para el control Fronterizo y de interoperabilidad
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Iniciar un proceso de Modernización de fronteras con la participación de un Sistema Tecnológico Integrado, a cargo de la PCM con la participación de la PNP, Aduanas, Migraciones y Servicio de Inteligencia; que puedan trazabilizar la información y puedan tomar acción inmediata ante el crimen internacional organizado (narcotráfico, trata de personas, terrorismo, lavado de activos); para lo cual deberá adquirirse lo siguiente:
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Adquisición de equipamiento de captura biométrica para personas en movimiento.
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Dotación de equipamiento portátil de captura biométrica para la fiscalización y verificación fronteriza donde no se cuente con un puesto de control migratorio.
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Patrullaje aeroespacial a través de drones para diferentes escenarios geográficos;
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Implementación de troncales fronterizas.
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Equipamiento de Trazabilidad de datos digitales;
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Big Data, blockchain para el almacenamiento, registro y trazabilidad de Datos Digitales.
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Implementar un sistema de tratamiento migratorio especial dirigido por el Ministerio de Relaciones Exteriores para el otorgamiento en masa de atención o rechazo de los solicitantes a refugio.
Infraestructura Temporal de migrantes para la espera en la Admisión o No admitidos
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Implementar zonas de custodia con financiamiento internacional, en tanto se determina la admisión o no de ingreso al país, en aeropuertos internacionales, zonas fronterizas terrestres, marítimas y fluviales.
Finalizamos resaltando que, una Política Nacional Migratoria eficiente valora las capacidades de los inmigrantes, para una inserción segura y productiva; aprovecha los talentos profesionales, técnicos, culturales y deportivos, entre otros; máxime si son escasos y cuya formación o preparación, experiencia no le ha representado costo alguno al país, reforzando sus cuadros nacionales en zonas donde se requieren esos perfiles, para un progreso conjunto, pero que necesitan Planes de Estado necesarios y urgentes.
(*) Magister en Derecho Civil y Comercial
Master en Gerencia Pública
Con Maestría en Gestión Pública
Abogada
Especialista en Gerencia Internacional
Ex Superintendente Nacional de Migraciones PerúEx Presidente de la Red Iberoamericana para las Migraciones