Analistas estiman que ninguno de los aspirantes llega consolidado al balotaje de este domingo, mientras el futuro del país se torna incierto con la pobreza que alcanza el 42.9% de la población y la inflación sobrepasa el 140%
Una medición realizada por la Universidad Di Tella da cuenta de que a octubre de este año, el 42,9% de la población cae en la pobreza
El ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, candidato presidencial de Unión por la Patria, y su rival, el ultraliberal Javier Milei, de La Libertad Avanza, se mantienen en intención de voto dentro de lo que podría considerarse un empate técnico, sin que ninguno de ellos haya logrado consolidarse como favorito de cara a la segunda vuelta electoral, prevista para este domingo 19 de noviembre.
Los analistas dicen que las elecciones son cruciales en el país con un espiral inflacionario que incrementa la pobreza. Una medición realizada por la Universidad Di Tella da cuenta de que a octubre de este año, el 42,9% de la población cae en la pobreza. Con esto se igualan el pico que se había tocado durante la pandemia.
Con la inflación en alza en lo que va del segundo semestre, se espera que el año cierre con un nivel más alto al del 40,1% del primer semestre, y que la inflación sobrepase el 140%
Massa fue el candidato más votado en la primera ronda. Con más de un 36% de los votos, mientras que Milei quedó segundo, acariciando el 30%.
Sin embargo, los sondeos anticipan ahora un escenario igualado, especialmente después de que algunos de los principales nombres de la derecha clásica, como la tercera candidata en liza, Patricia Bullrich, y el expresidente Mauricio Macri, hayan dado púbicamente su apoyo a Milei.
Desde este 11 de noviembre, ya no pueden publicarse nuevas encuestas, pero las más recientes sitúan a los dos candidatos en disputa por la Casa Rosada con una baja diferencia, en la mayoría de los casos dentro del margen de error.
Las encuestas recogidas por el diario ‘La Nación’ dibujan una ligera ventaja para Milei, pese a que Massa dio la sorpresa en primera vuelta porque los sondeos no supieron medir el verdadero nivel de apoyo del aspirante peronista.
En las elecciones primarias de agosto, ese mismo factor sorpresa favoreció a Milei, que se convirtió en el precandidato más votado en un contexto donde prácticamente había un empate entre los tres principales bloques, por lo que previsiblemente los mensajes y los actos se intensificarán durante los próximos días en busca de los votos que aún pueden oscilar entre distintos bandos.