En estos días que se hablan de iniciativas legislativas para “dejar de contratar lo más barato, evitar malos expedientes técnicos y evitar paralización de obras por juicios”, sería bueno considerar retornar al sistema del Reglamento Único de Licitaciones y Contratos de Obras Públicas
El MEF continúa con la mala costumbre -iniciada en el gobierno fujimorista y profundizada en el segundo régimen aprista- de medir la eficiencia en las gestiones de los gobiernos nacional, regionales y locales, en función al monto de gasto de sus Presupuestos Institucionales de Apertura (PIA) y del Modificado (PIM) de ser el caso. Es decir, la lógica es, gasta más, es buen gobernante, lo que es relativo por ser el gasto parte de una serie de acciones para ejecución presupuestal.
Lo más apegado al ideal de lo correcto, para medir grados (rankings) de eficiencia, es evaluar integralmente la calidad de la inversión; proceso que se inicia con la identificación de la necesidad, priorización del proyecto, nivel del expediente técnico, costo real y liquidación, sin soslayar la idoneidad para establecer los términos de referencia y los precios de referencia, dos factores claves, estos dos últimos, para garantizar la trasparencia, que deben ser revisados, por ser factores del incremento de costos.
El gasto solo, es una información relativa que puede esconder cantidades sobrevaluadas por la adquisición de bienes y/o servicios y obras. Además, en la etapa de devengados, el MEF, considera como ejecutado el gasto, cuando debe ser por proceso culminado y recepción a satisfacción. En tal sentido, la lógica de ponderar el gasto, es equivocada, más cuando se deciden obras por una presión mediática que “crea” una necesidad para que los Titulares de Pliego justifiquen gastos en proyectos de poco beneficio social.
En estos días que se hablan de iniciativas legislativas para “dejar de contratar lo más barato, evitar malos expedientes técnicos y evitar paralización de obras por juicios”, sería bueno considerar retornar al sistema del Reglamento Único de Licitaciones y Contratos de Obras Públicas (RULCOP) eliminado por el gobierno fujimorista, que determinaba que la Buena Pro de las obras se entregara al PROMEDIO de todas las ofertas presentadas en sobre cerrado y en presencia de NOTARIO PÚBLICO Y DE TODOS LOS POSTORES y NO a la más baja (que obligaba a retirarse a empresas serias, que no podían competir con ofertas de empresas que les interesaba BLANQUEAR DINERO MAL HABIDO y no, la buena ejecución de las obras).
En esa fórmula, las obras se licitaban con un Presupuesto Base (PB) de un Expediente Técnico elaborado por los profesionales y técnicos en ejercicio en la administración pública o de ser el caso, por empresas solventes y, las ofertas no podían ser mayores al 110% ni menores al 90% del PB. Los MILES DE MILLONES de soles que se vienen perdiendo en las licitaciones de los últimos 30 años, se evitarían si en el PRIMER SOBRE de la oferta, el Postor presentara una CARTA FIANZA por buena ejecución de la obra, certificado del IPSS mostrando que no tiene deudas por Beneficios Sociales, Certificado que muestre experiencia en obras similares.
El SEGUNDO SOBRE, sólo contendría EL MONTO DE LA OFERTA. El promedio de todas las ofertas determinaba al ganador en mesa, como reiteramos, con la presencia de todos los postores se abrirían sus sobres. Si fuera posible la difusión del acto por la TV, sería mucho mejor. Es transparencia. Estas simples medidas ahorrarían al Perú pérdidas cuantiosas y obras abandonadas. La clave está en la CARTA FIANZA, de entidad financiera registrada por la SBS, desechando las cartas fianza de instituciones financieras extranjeras como las chinas, ya que el Banco pagaría cualquier pérdida. Es decir, se le devolvería la calidad a la inversión.
Finalmente, es oportuna la transcripción de una propuesta del Ing. Luis Montenegro Gómez, realizada hace cuatro años, que viene al caso.
“Ahora que se viene la crisis económica mundial y es necesario una política contracíclica, me permito plantear una idea que debería ayudar a que las inversiones públicas, sean eficientes y útiles.
Debería de haber un banco de proyectos de locales escolares, unidades de salud para el primer nivel, pequeños puentes, canales, minicentrales de hidroeléctricas, andenería, pequeños reservorios con conexiones de tuberías para riego por goteo, etc.
Todos estos proyectos, deben contar con un Expediente Técnico completo, es decir con planos, metrados, especificaciones técnicas adecuadas a cada región del Perú y presupuestos actualizados, de tal manera que los alcaldes y gobernadores regionales, no tengan que priorizar, decidir y contratar obras que van a demorar en su diseño, en tiempo y en ejecutar el gasto que generalmente es sobrevalorado, permitiendo la corrupción. lo único que debería hacer el Estado, es contar con laboratorios móviles de Estudio de Suelos, para determinar la resistencia del suelo en donde se debe construir y diseñar la cimentación. Todo lo demás estará en el Expediente.
Cuando una autoridad, decida construir, lo que tendría que hacer es entrar a la página web del Sector Estatal correspondiente, escoger el expediente respectivo, que tendrá un costo real, preestablecido y comenzar de inmediato la construcción.
La modalidad, de si la obra se hace por contrato o por administración directa, es irrelevante, en la medida en que su calidad y costo, sean los especificados en el Expediente Técnico; esto, permitirá una rápida utilización del dinero público en obras útiles, a costo reales, dando trabajo de inmediato a miles de peruanos, inclusive a los que no son calificados (así mismo, Si se aplica COOPOP puede haber ahorros por mano de obra no calificada para la implementación de la misma obra)
En el gobierno del presidente Fernando Belaunde Terry, existían este tipo de expedientes, tanto en el Instituto Nacional de Planificación (INP) y en la Oficina de COOPERACIÓN Popular (COOPOP) que fueron desaparecidos (COOPOP desde 1986 e INP en los primeros años de la década de los 90) por gobiernos posteriores, pero todo lo anterior se puede reactualizar y ahora, mejorar, con el Internet.”
Excelente artículo, que el MEF, debe tener en cuenta
GRACIAS POR SU COMENTARIO.