Alejandro Sánchez Sanchez, propietario de la casa de Sarratera e investigados con Pedro Castillo en el caso Gabinete en la Sombra, llegó ayer en la tarde al país expulsado de Estados Unidos.
Estaba prófugo de la justicia peruana desde octubre de 2022, luego de que el Poder Judicial ordenó su detención preliminar por un plazo de 30 meses
A su llegada al Grupo Aéreo N.° 8, el empresario cajamarquino fue descendido de un avión por personal de la Policía Nacional del Perú, según imágenes difundidas por el Ministerio Público.
«La fiscal Naomi Bustillos, del Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción del Poder (Eficcop) se encuentra en el lugar para garantizar que se cumplan con los protocolos correspondientes», indica la Fiscalía.
Su arribó se produjo a las 14:10 horas de ayer en un vuelo chárter, junto con 150 deportados de Estados Unidos. Vestía pantalón de jeans azul y llevaba puesto un chaleco de la policía con la inscripción: detenido.
Sánchez Sánchez estaba prófugo de la justicia peruana desde octubre de 2022, luego de que el Poder Judicial ordenó su detención preliminar por un plazo de 30 meses, en el marco de las investigaciones por el presunto delito de investigación criminal.
Fue detenido en Estados Unidos por la policía de Migraciones de Estados Unidos cuanto intentaba cruzar la frontera en forma irregular e ingresar a territorio norteamericano. El Gobierno de Estados Unidos rechazó su pedido de asilo y dispuso su expulsión, tras agotarse todos los procedimientos presentados por su defensa.
La titular de la Eficcop, Marita Barreto, informó que corresponde ahora que el deportado empresario sea trasladado a la sede de requisitorias y luego será puesto a disposición del penal que corresponda.
Se le atribuye ser parte de una organización criminal liderada por el expresidente Pedro Castillo que habría copado diversas instituciones del Estado, desde donde habrían beneficiado a empresa con obras.
Dueño de la casa de Sarratea
Sánchez Sánchez es además propietario de la casa ubicada en el jirón Sarratea, en Breña, que funcionó como oficinas de Pedro Castillo y donde se reunía con diversas personas, durante la campaña de segunda vuelta electoral.
Posteriormente, Castillo, en su condición de presidente de la República, continuaba realizando reuniones con congresistas, ministros y proveedores del Estado en esta vivienda.
Ante las autoridades, Sánchez Sánchez dijo que conoció a Castillo durante una protesta magisterial que lideró en Lima y que le prestó la vivienda en su campaña para sus actividades.
El empresario cajamarquino participó de las investigaciones en el Ministerio Público hasta que se dispuso su detención preliminar, en octubre de 2022, fecha en que pasó a la clandestinidad. El Ministerio del Interior ofrecía 30 mil soles por información que lleve a su captura.
Se volvió a saber de su paradero cuando fue detenido por la policía de Migraciones en la frontera de Estados Unidos, cuando intentaba ingresar en forma irregular al territorio norteamericano.
Fue recluido en un centro de detención de inmigrantes, donde pidió asilo argumentando ser perseguido político, pedido que fue denegado. Tras agotarse todos los procedimientos administrativos, hoy regresa al país deportado.