BANCO MUNDIAL: Los mercados internacionales confían en la solidez fiscal del Perú

No obstante, resaltó que desde el punto de vista de la deuda pública, “el incremento de la deuda pública bruta ha sido menor que la de los pares de la región” y al hacer las comparaciones con países de similar nivel de desarrollo, encuentran que la deuda pública del Perú es “relativamente baja”.

Señaló que este resultado es producto de la utilización de los ahorros del Estado, por cuanto los activos financieros del sector público se han reducido desde el año 2015 a la fecha.

Asimismo, destacó que hay un “comportamiento muy prudente” del Estado en materia fiscal, porque en tiempos difíciles gasta y en etapa de bonanza trata de ahorrar.

Cusato refirió que el Banco Mundial tiene una posición sobre el grado de fortaleza fiscal del país, también los analistas y economistas locales también lo tienen, pero los mercados financieros evalúan y califican diariamente el riesgo país del Perú.

“Entonces, cuando uno observa los datos objetivos, vemos que los mercados aún confían en la solidez fiscal que tiene el país”, subrayó.

Modificaciones presupuestarias

Por otra parte, advirtió la cantidad de modificaciones presupuestales para los proyectos de inversión pública y que en el 2023 se realizaron 650,000 pequeños cambios presupuestarios.

“Cuando los ingresos del Estado suben, el Estado dedica más recursos a proyectos de inversión pública o a través de modificaciones presupuestarias, pero a su vez, cuando los recursos del Estado caen sucesivamente, como ha ocurrido, digamos desde el año 2021, el Estado también se ajusta a través de estas modificaciones presupuestarias”, explicó.

Asimismo Cusato indicó que el Perú tiene margen para movilizar recursos para la inversión pública.

“Perú aún tiene margen para movilizar mayor cantidad de recursos. Si miramos los promedios de ingresos totales, digamos, con la región o países similares en términos de desarrollo, aún hay mucho techo, digamos, por potencialmente subir la recaudación tributaria”, explicó. 

En ese sentido, indicó que hay espacio para mejorar la recaudación del impuesto a la renta personal, porque es bajo en comparación a otros países de la región.

Refirió que en el documento “Revisión de Finanzas Públicas para el Perú”, se van a encontrar los riesgos fiscales y enfatizó la necesidad de limitar la discrecionalidad del Congreso en términos de iniciativas de gasto.

“En el caso de modificaciones presupuestales, estamos analizando en el reporte, deberíamos incluir, digamos, las reasignaciones presupuestales e incluir algún tipo de criterio o principios de continuidad de servicio”, dijo.

También consideró que es importante fortalecer al Consejo Fiscal y rediseñar reglas fiscales, introduciendo básicamente mecanismos correctivos asociados al gasto futuro. 

Por otra parte, señaló que en el país hay una mayor creación de proyectos de inversión pública, pero se hace necesario mejorar la capacidad de ejecución. 

Dispersión de tasas impositivas

De otro lado, Cusato indicó que hay mucha heterogeneidad en las tasas impositivas, por ejemplo, refirió que en el sector finanzas y bienes raíces la tasa impositiva efectiva está entre 7 y 8%, mientras que en sectores de restaurantes y alojamiento, retail o manufactura, hay “tasas muy bajitas” de 2% y 3%. 

“Entonces hay mucha dispersión, diferencia en el pago del IGV entre sectores y naturalmente la Sunat tiene que explotar esta información para hacer una mejor fiscalización”, subrayó.

Mayor eficiencia y calidad

Por su parte, la economista senior del Banco Mundial, Natasha Rova, señaló que los ingresos tributarios del Perú están por debajo del 15% del PBI, “que es el límite que hemos identificado como Banco Mundial para que un país pueda brindar servicios necesarios y esenciales para sus ciudadanos”

«En la última década Perú ha estado por debajo de ese nivel, lo que implica también es que el gasto no puede ser alto sin recursos. Entonces, es un gasto -que relacionado con otros países pares- está por debajo de la media del promedio de la región o de los países aspiracionales”, dijo Rova.

Por ello, señaló la importancia de tener mayor eficiencia y calidad del gasto público en los sectores, salud, educación e inversión pública.

También indicó que en el caso de las compras públicas, hay adquisiciones a precios diferentes y altos entre las diversas entidades públicas y por ello en este aspecto “hay margen también de ahorrar o de utilizar bien esos recursos”.

El documento del Banco Mundial, precisa que “al mejorar la eficiencia de las adquisiciones públicas, el Gobierno podría lograr ahorros de hasta el 19% del gasto actual en adquisiciones, lo que equivale al 1.5% del PBI”.