En conclusión, todo fue un cuento chino, un milagro naranja -al restablecerse de su salud-. o una burla para aliados de Fujimori.
El indulto a Alberto Fujimori fue un beneficio concedido el 24 de diciembre del 2017, por el entonces presidente, Pedro Pablo Kuczynski.
Según el artículo 118 de la Carta Magna: “Corresponde al presidente de la República:”, inciso 21 “Conceder indultos y conmutar penas. Ejercer el derecho de gracia en beneficio de los procesados en los casos en que la etapa de instrucción haya excedido el doble de su plazo más su ampliatoria”.
El 11 de diciembre del 2017 Fujimori realizó la solicitud de indulto y derecho de gracia por razones humanitarias. La junta médica integrada recomendó indultarlo por una “enfermedad progresiva, degenerativa e incurable”.
El 24 de diciembre la Secretaría de Prensa del Despacho Presidencial informó: “Una junta médica oficial ha evaluado al interno y ha determinado que el señor Fujimori padece de una enfermedad progresiva, degenerativa e incurable y que las condiciones carcelarias significan un grave riesgo a su vida, salud e integridad. El presidente de la República, en uso de las atribuciones que le confiere la Constitución Política del Perú para tales fines, ha decidido conceder el indulto humanitario al señor Alberto Fujimori Fujimori”. Ese mismo día se publicó la R.S. No. 281-2017-JUS. que “Conceden indulto y derecho de gracia por razones humanitarias al interno del Establecimiento Penitenciario Barbadillo”.
El indulto es la potestad del presidente de la República para adoptar la renuncia al ejercicio del poder punitivo del Estado respecto de los condenados, pudiendo otorgarse por razones humanitarias.
El literal b) del numeral 6.4 del artículo 6 del Decreto Supremo No. 004-2007-JUS, modificado por el artículo 5 del Decreto Supremo No. 008-2010-JUS, norma de creación de la Comisión de Gracias Presidenciales y el literal b) del artículo 31 del Reglamento Interno de la Comisión de Gracias Presidenciales, aprobado mediante Resolución Ministerial No. 0162-2010-JUS, disponen que se recomendará el indulto y derecho de gracia por razones humanitarias, entre otros, cuando el interno padece de una enfermedad no terminal grave, que se encuentre en etapa avanzada, progresiva, degenerativa e incurable; y además que las condiciones carcelarias puedan colocar en grave riesgo su vida, salud e integridad.
El Informe Social No. 01-2017-INPE/18-239-S.S., del 4 de diciembre del 2017, indica que se encuentra delicado de salud, con diagnóstico médico de un cáncer de alto riesgo en la cavidad bucal; asimismo, refiere que dicho estado le impide el desarrollo normal de sus actividades cotidianas, su dolencia le limita la fluidez de una pronunciación correcta. Refiere también que de modo continuo recae en un estado de postración por depresión de la que se recupera de forma momentánea, por la atención médica y psiquiátrica que recibe; por lo que, el mencionado informe opina favorablemente a la solicitud del interno, debido a razones humanitarias”.
La Comisión de Gracias Presidenciales, determinó en el Informe del Expediente No. 00235-2017-JUS/CGP que “dada la condición de salud que muestra deterioro y vulnerabilidad, el citado solicitante no significaría un peligro para la sociedad y, por el contrario, dicha exigencia podría representar un daño irreparable a su derecho fundamental a la integridad física o, incluso, a su vida, por lo que, debe primar el principio y derecho a la dignidad humana, sin que ello signifique una aceptación o validación de su accionar o una eliminación de la reprochabilidad moral y social de los delitos; en ese sentido, la citada Comisión recomienda la concesión del indulto y derecho de gracia por razones humanitarias; que hace que esta persona no está en capacidad de recibir sanción”.
Se resolvió en el artículo 1 “Conceder el INDULTO Y DERECHO DE GRACIA POR RAZONES HUMANITARIAS al interno del Establecimiento Penitenciario Barbadillo, ALBERTO FUJIMORI FUJIMORI, respecto de las condenas y procesos penales que a la fecha se encuentran vigentes”.
“La militancia está muy entusiasta y el pueblo fujimorista ha cerrado filas con mucha algarabía al ver a mi padre inscribirse en el partido. Creo que adelantar la posibilidad de la carrera presidencial es adelantarnos a muchos hechos; todas las posibilidades están abiertas. Él está absolutamente lúcido, aunque tenga enfermedades que viene arrastrando desde hace años, pero tiene una gran fortaleza”, sostuvo en Canal N.