Se necesita recuperar valores en la democracia, y estos valores deben tener como puente a los partidos políticos, que son los que representan los intereses de la comunidad
Polibio, uno de los más reconocidos historiadores griegos, junto con Tucídides y Heródoto, en la época de la república helénica señalaba que la democracia tenía dos elementos importantes: la isegoría y la parresía. Estos términos fueron posteriormente analizados en profundidad por Foucault en relación con la democracia ateniense.
Aterrizando ambos conceptos a nuestra realidad, la isegoría se basa en el derecho que tiene todo ciudadano a expresarse libremente, algo que en la actualidad se ve amenazado debido a la represión y la incorporación cada día más frecuente de la doctrina «woke» que busca censurar opiniones que no van alineadas con su pensamiento.
Mientras tanto, la parresía, otro concepto fundamental en el arte de hacer política, se refiere a la necesidad de generar actitudes que estén en relación con la verdad de las cosas, a propuestas políticas que se alineen con la realidad, algo que en la política de hoy puede parecer una utopía.
Pero ¿por qué traer a colación estos dos términos de la democracia griega a nuestra actualidad? Una de las razones es que hoy la clase política a nivel mundial se ha convertido en meros activistas y ya no en líderes políticos, degradando este servicio al nivel de rechazo por parte de la ciudadanía en distintos ámbitos del globo.
Se necesita recuperar valores en la democracia, y estos valores deben tener como puente a los partidos políticos, que son los que representan los intereses de la comunidad y los transforman en propuestas para llegar al gobierno.
Es necesario volver a traer el sentido común, basado en una integración de la comunidad donde las clases políticas sean el soporte y, de esta manera, recuperar la visión del servicio hacia los demás. Esto es algo importante en la política, sin embargo, está en el último tópico de la lista, por lo que se requiere volver quizás a las raíces de la política y revisar algunos elementos que se perdieron en el camino.
Hoy es tiempo de que se vuelva a decir la verdad a los ciudadanos (isegoría) y se busque el bien común para la comunidad (parresía). De esta forma, mejorarán las condiciones para todos los ciudadanos. Podríamos decir que de aquí parte todo.
