lo central tiene que ser, si o si “desaparecer, replegar la delincuencia organizada en todas sus modalidades”.
Sí de Plan de seguridad ciudadana se trata, no necesariamente debe ser diseñado en un largo y tedioso manuscrito de acciones a seguir, que después se obvian de llevar a cabo y muy pocos se ciñen a seguirlo como debería ser.
Lo cierto es que en el Perú, lo puntual es que tengamos un plan que conlleve un millón por ciento de acción policial, hasta en el más recóndito sitio de nuestro territorio patrio, poner contra la pared a toda la delincuencia en todas las ciudades, en el campo, en las montañas en las fronteras.
Este debe ser el único objetivo a seguir al pie de la letra, y en paralelo ir construyendo de milímetro a milímetro una sociedad de voluntades: “Todo el Perú unido contra la delincuencia”, es decir, crear la gran alianza de ciudadanos en apoyo mutuo con la autoridad.
Siendo así, el ministro del Interior debe enfocarse en un objetivo principal como responsable de diseñar y liderar la implementación del Plan Nacional de Seguridad Ciudadana.
Dentro de este propósito, lo central tiene que ser, si o si “desaparecer, replegar la delincuencia organizada en todas sus modalidades”. Para ello se requerirá hablar un solo lenguaje con los responsables de sus órganos de línea, la Policía Nacional, la Superintendencia Nacional de Migraciones, la Superintendencia Nacional de Control de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (SUCAMEC).
EL COMANDANTE GENERAL
La Policía Nacional del Perú tiene como función velar constitucionalmente por el Orden Público y la Paz, prestar protección, ayudar a las personas y a la comunidad en general, garantizar el cumplimiento de las leyes, la seguridad del patrimonio público y privado.
En ese sentido, el ministro de Interior no es el responsable de la operatividad y el control policial, ni del patrullaje de las calles o carreteras, ni de ninguno de los servicios policiales, ni nada que tenga que ver con las responsabilidades exclusivamente del comandante General de la PNP.
A él básicamente le corresponde; dirigir, coordinar, evaluar, controlar y responder de la operatividad de cada uno de sus comandados, así como comandar a todas sus fuerzas policiales en el ámbito nacional, el cual debe dar cuenta al ministro del Interior de los acontecimientos sucedidos, para que este a su vez de cuenta a la Presidencia de la Republica para su conocimiento y fines.
LA INVERSIÓN DE ROLES
El gran problema de casi siempre ha sido la inversión de roles, el Ministro no puede hacer el papel que le corresponde al Comandante General, lo policial constitucionalmente es rol del COMGEN y al Mininter lo concierne lo político, cada cual debe estar abocado exclusivamente en lo suyo, metidos en lo que la ciudadanía necesita, que es acabar con la inseguridad de una vez por todas.
El manejo Policial debe de ser absolutamente sin intromisión política, recién a partir de allí podríamos decir que terminantemente se generaría el cambio esperado por tantas décadas.
En mi humilde experiencia de larga data, creo firmemente que mi tesis al respecto no tiene reveces, ya que es fácil de entender para llevarse a cabo.
¿QUÉ HACER CON MIGRACIONES Y LA SUCAMEC?
Es prioritario que el ministro del Interior establezca sus prioridades, ya que también pertenecen a su Sector, Superintendencia Nacional de Migraciones, la Superintendencia Nacional de Control de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (SUCAMEC), entidades con quien también debe trabajar más de cerca, explicare bajo mi punto de vista el por qué.
Hasta el momento, a través de los años, nunca se ha visto que el Mininter de turno le haya dado la fuerza y lugar que deberían, como sus propios brazos de acción ejecutiva, comencemos por la Superintendencia Nacional de Migraciones y su rol constitucional.
LA SUPERINTENDENCIA NACIONAL DE MIGRACIONES
Es la entidad que autoriza, deniega y controla el ingreso, salida y permanencia legal de los extranjeros al país, así como impide la entrada o la salida de nacionales y extranjeros que no cumplan con los requisitos establecidos por las normativas migratorias de Ley.
Dicho en lenguaje simple, se encarga de cernir entre lo bueno y lo malo de lo que ingresa o sale de nuestro territorio; Migraciones es la entidad que garantiza la calidad de turistas o inmigrantes que ingresan a nuestro suelo patrio.
En mi humilde punto de vista un Inspector de Migraciones debe contar con un uniforme que lo identifique como tal y lo categorice en el nivel que se desarrolla, ellos son la primera impresión que se lleva un turista, no es una simple persona que sella pasaportes. Ellos son la autoridad migratoria que vela por el ingreso y salida en nuestros puntos de control. Es obvio que su labor tiene suma relevancia, ya que también tiene que ver con nuestra con la seguridad nacional.
Por su parte la Superintendencia Nacional De Control De Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos De Uso Civil (SUCAMEC), es regular las actividades en el ámbito de los servicios de seguridad privada, fabricación y comercio de armas, municiones y conexos, explosivos y productos pirotécnicos de uso civil. Formular, ejecutar y supervisar los planes, programas y proyectos para el ejercicio de sus atribuciones.
De manera tal, que también requiere de un reapalancamiento institucional, en todo orden y sentido. Es vital potenciar la SUCAMEC al igual, que se debe hacer con Migraciones, con la última tecnología de punta y permanente capacitación para el personal en todos sus niveles.
Entendiendo que la propia SUCAMEC, controla el manejo de armas del ámbito civil y por ende también velan por la seguridad nacional y ciudadana desde su responsabilidad constitucional.
UN CONSEJO SIMPLE
La percepción de inseguridad ciudadana es sintomática y la podríamos cambiar en tiempo récord, con una simple orden del Comandante General de la Policía, considerando que el Perú tiene 25 Regiones, más la Provincia Constitucional del Callao.
El COMGEN debería ordenar que en Lima Metropolitana, Lima Provincias, todas las Regiones sin excepciones, cada general con sus coroneles salgan todos los días a las calles a patrullar.
La medida debería incluir a comisarios y a los jefes de las Dipincris, entre otros hasta acabar con las mafias organizadas efectuando full operativos en el día y, por la tarde, y en la noche, cero tregua, sin desmayo, sin rodeos.
Todos operando en las calles, mentalizados en avasallar y poner contra la pared a la delincuencia en todas sus modalidades, con el objetico central de recuperar el Principio de Autoridad, recordándoles a los mafias organizadas que aquí en el Perú nos hacemos respetar.