Hay gente indeseable que quiere atacar al Perú como piñata, ahora como borregos muchos se unen al paro para boicotear el APEC, desde transportistas, los integrantes de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), los trabajadores del Ministerio Público, hasta el gremio de trabajadoras del hogar y etc., se plegarán a la paralización.
Ustedes se imaginan que una trabajadora del hogar haga huelga y marche en el frontis de la casa que vive, que tiene alimentos, un techo donde dormir, un sueldo y gratificaciones y no paga ni luz ni agua; realmente la salud mental en el PERÚ está agonizando.
El Perú es anfitrión de la Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), la cual reunirá a líderes de las 21 economías-miembros para debatir temas relacionados con el comercio, la inversión y el desarrollo económico.
Esto representa una oportunidad significativa para fortalecer las relaciones comerciales con las principales economías del mundo, que redundará en el Perú.
Nuestro país está en la necesidad de mirar más allá de sus abundantes recursos naturales y enfocarse en su posición geo-estratégica en el Pacífico, para fortalecer su rol como actor geo-político en esta parte estratégica de la región.
Este enfoque permitirá no solo destacarse como un proveedor de materias primas, sino también como un líder en integración económica, comercio y desarrollo en América y el mundo.
Con una promoción de una economía moderna e innovadora, nuestro país tiene la posibilidad de consolidarse como un referente de estabilidad y cooperación en esta parte del hemisferio. Sin duda, es un momento histórico que no debemos dejar de aprovechar.
No obstante, a las grandes expectativas sociales y económicas, todas absolutamente legítimas, debemos reconocer que estamos frente a un debilitamiento sistemático de la institucionalidad democrática del Perú.
Ello obliga a todos los ciudadanos a asumir una actitud responsable de cara al futuro, en torno a la unidad nacional, habida cuenta que existen muchos intereses en destruir la viabilidad del desarrollo de nuestras infraestructuras estratégicas, próximas a inaugurarse.
Estamos en la obligación moral y patriótica de velar por los sagrados intereses del Perú y visibilizar las amenazas que en torno a nuestro desarrollo se vienen generando, por parte de quienes tratan de perturbar, obstaculizar y manipular al pueblo en contra de su propio bienestar, con un absurdo adelanto de elecciones, vacando a la presidente Boluarte.
El derecho a la protesta es un bien jurídico constitucional, no obstante, lo es también, la obligación de contribuir con el interés nacional; lo primero es facultativo, mientras que lo segundo es imperativo, toda vez que estamos frente a un momento histórico como el actual, que exige nuestra firme y activa participación, en defensa de los derechos constitucionales y fundamentales de la persona y de la sociedad.
Es obligación constitucional del Gobierno garantizar el orden interno y la seguridad pública de la población durante el desarrollo del foro, por su parte el Congreso de la República debe de declarar -ipso facto- de interés nacional la Semana de Líderes que está por iniciarse.
Por su parte el Ministerio Público debe de disponer de manera inmediata el despliegue permanente de las fiscalías especializadas de prevención del delito a nivel nacional.
El Perú queridos amigos está muy por encima de las mezquindades de algunos.