«TERROR QUE IMPONE EL CHAVISMO NO SE VEÍA DESDE EL GOLPE DE PINOCHET»
El coordinador legal de derechos humanos, Marino Alvarado, detalló que las persecuciones y asesinatos contra activistas y dirigentes de la oposición llaman la atención por la ‘masividad y la aplicación indiscriminado de la Ley contra el Terrorismo” por parte de Maduro
“…un caso dramático es el de un joven de 17 años con autismo que fue detenido en Los Teques… su familia presentó el informe psicológico que detalla su condición, pero Maduro lo ha confinado en los calabozos de Polimiranda…”.
El régimen chavista ha sumido en el horror y la incertidumbre a millones de familias venezolanas, en una de las mayores olas represivas que no se veían en América Latina desde el golpe de Augusto Pinochet.
La persecución y amedrentamiento está a cargo de grupos paramilitares y torturadores llegados de Cuba y que pertenecen al servicio de Inteligencia, el G-2.
La mayoría de las víctimas de la persecución y encarcelamiento pertenecen a sectores populares y son jóvenes menores de 25 años. Organismos internacionales y medios independientes han reiterado su preocupación por el grave deterioro de los derechos políticos, civiles y la libertad de expresión en este país de poco más de 28 millones de habitantes.
Informes de prensa divulgados mediante medios digitales señalaron que aunque en las últimas manifestaciones los venezolanos de distintas regiones del país gritaban: “No tenemos miedo”, parece que este se ha incrementado con el pasar de las horas tras el recrudecimiento de la persecución oficialista.
Tras las elecciones del pasado 28 de julio, en las que venció el opositor Edmundo González Urrutia, el gobierno respondió a las protestas con violencia, con los colectivos armados en la calle y tocando de puerta en puerta en busca de detractores del poder, usaron la fuerza extrema, dejando miles de detenidos y más de treinta muertos y cientos de heridos.
El diario digital TalCual, que por seguridad no revela la identidad de los denunciantes, señaló que trabajadores de Sidor están siendo perseguidos por votar por Gonzáles Urrutia. Varios de ellos están escondidos por temor a ser encarcelados, han sacado a sus familiares de sus casas, no salen después de las seis de la tarde y no llevan consigo sus teléfonos para que la policía no los revise.
Régimen policiaco siembra el terror
“Nos toman fotos sospechosamente en la calle”, “hay detenidos que no han hecho nada y ahora no se sabe dónde están”, “nos persiguen por lo que ocurrió con las elecciones, por el tema político”; “sacan a la gente, a los vecinos de sus casas sin órdenes y los torturan en la calle”, labor macabra que está a cargo de los ‘sapos’ (soplones al servicio del régimen”, denuncian.
Uno de los entrevistados dijo que una vecina integrante del consejo comunal le dijo a un grupo chavista que “yo era opositor y desde ese momento estoy perseguido por lo que tengo que cambiar de escondite”, señaló.
Versiones como la anterior se repiten como la de aquel empleado de una siderúrgica que narró que “Salimos a la calle sin teléfono porque hay persecución fuerte por parte de los agentes del SEBIN (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional), de la DGCIN (Dirección General de Contrainteligencia Nacional), GN (Guardia Nacional) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB).