El destino de la presidente devota de los afeites y de los adornos, está trazado, llegue o no a 2026.
Dijo Einstein que, si había Tercera Guerra Mundial, la Cuarta sería con palos y piedras. El punto es que quizá no quede quién pueda levantar un palo o lanzar una piedra. Pero eso está fuera de nuestra esfera de decisión.
En EUA se llama ‘lame duck’ (pato rengo o pato cojo) al presidente en funciones cuyo sucesor ya fue elegido. Se supone que el pato rengo no debe tomar ninguna decisión trascendente en el interregno. Pero nadie contó con que el pato cojo estaba senil y con ganas de atender los negocios de su hijo (o los negocios que el hijo ejecutaba en su nombre) vinculados al comercio de armas. Una primera pregunta: ¿Quién, que no esté mal de la sesera, le pone Hunter (cazador) de nombre a su hijo?
En fin, no estamos en esas ligas, así que crucemos los dedos porque la razón y la paz se impongan. Así que, mientras tanto, a lo nuestro.
Dilapidando el poco logro
Acababa Dina Boluarte de tener un sonoro éxito internacional con el Foro APEC y, sobre todo, con la inauguración del Puerto de Chancay, cuando se publicó una encuesta de Datum que le asignada 3% de aprobación a la presidente. La empresa no difundió, de modo enfático como debía haberlo hecho, que este resultado correspondía a una investigación realizada del 7 al 11 de noviembre (justo antes de APEC) y, sin embargo, el gobierno fue incapaz de defenderse.
La incapacidad, ya lo sabemos, es la principal característica del actual gobierno y en ella persiste con tozudez y contumacia.
Luego vino la propuesta de la llamada Ley MAPE (Ley de la Pequeña Minería y de la Minería Artesanal), que pretende resolver los temas pendientes de formalización de la minería artesanal cuando el punto en cuestión es el vencimiento del REINFO (Registro Integral de Formalización Minera) este fin de año. Gracias a este registro, que se renueva cada vez que está a punto de caducar, un importante segmento de mineros ilegales (delincuentes, por si no quedó claro) ha encontrado la niebla que necesita para tomar una posición dominante en las economías criminales.
El proyecto de la Ley MAPE, por muy bueno que fuera (todo indica que no lo es), no puede eludir el procedimiento legislativo y el proceso de reglamentación, que durará meses. Mientras tanto continúa la “tierra de nadie” amparada por el REINFO, que sólo traerá conflicto y confrontación.
Un ministro como Rómulo Mucho, que llegó precedido de las mejores credenciales y acompañado de fundadas esperanzas, resultó ser un fiasco. No olvidemos que la crisis del directorio de Petroperú ha sido resuelta de la peor manera y que Mucho (igual que Arista del MEF) ha sido directo responsable de este desastre anunciado. Muy bien, ahora, el ministro Mucho enfrenta una moción de censura en el Congreso.
Del transfuguismo al profuguismo
Todo es decadente en nuestra gestión pública y hasta la delincuencia anclada en el poder se ha devaluado. Hemos pasado de Montesinos a Chibolín e igual ha seguido descendiendo el debate público y los medios, además de que la irrupción de las redes sociales ha agravado, creo, el asunto.
El Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS) está igual que las conservas que distribuye a nuestros niños su programa estrella Qali Warma: corruptas, adulteradas y vencidas.
Y es allí donde nuestra presidente tiene su feudo. Y es allí donde operan los funcionarios de su mayor confianza. Y es allí donde podemos encontrar la caja chica (no tan chica) del actual gobierno.
Resulta ser, por otro lado, que el hilo conductor del gobierno de Castillo-Boluarte es la corrupción de baja estofa. Hemos llegado al punto en que los prófugos ostentan desvergonzado poder. Antes nos preocupaba el transfuguismo, ahora nos debe preocupar, igual o más, el profuguismo.
A los Juan Silva o a los Vladimir Cerrón, se suman ahora los Nicanor Boluarte. Todos bajo protección o tolerancia del bufonesco ministro del Interior y, muy probablemente, de la propia presidente.
Y junto a los Pérez, Velas y Barretos, se exhiben también los Carhuanchos. Irrespetar la Constitución y las leyes para muchos fiscales y jueces se ha vuelto pan de cada día, incluso con sospechosos avales internacionales. Pero todo es más de lo mismo.
Periodistas que, ante la burla de Odebrecht, deberían clamar por la incautación de los archivos de la corporación brasilera que se guardan en Polysistemas, no lo hacen. Son veinte millones de folios que seguramente contendrán más de una sorpresa. ¿Será por eso que no quieren que se los conozca?
Dina no da para más y, efectivamente, una vez que convoque a elecciones generales, cosa que tendrá que suceder en abril de 2025, dejará de ser útil para alguien.
Recordemos que todo lo que establece la Constitución es constitucional. Y la vacancia está prevista en la Constitución.
El destino de la presidente devota de los afeites y de los adornos, está trazado, llegue o no a 2026.
Volvamos al inicio, esperemos que no haya Tercera Guerra Mundial. Investiguemos un poco la historia y no nos pronunciemos con prisa. Confiemos en que prime la llamada realpolitik y no el Alzheimer. Mientras tanto busquemos la mejor (y más pronta) salida en el país. Ahora que tenemos un brillante panorama ante nuestros ojos.
