No basta con prometer más gasto o nuevas leyes. Es urgente reorganizar el Estado. Bienvenida esta brújula para encontrar el rumbo.
En tiempos de grave criminalidad organizada necesitamos recuperar un estado eficiente que cumpla con los deberes primordiales que la Constitución dispone. Nos toca superar la parálisis institucional, la fragmentación política y el ostensible descontento social. Para ello se requieren reformas impostergables y estamos en el momento de hablar de ellas.
Juan José Marthans, uno de nuestros mejores economistas, en su reciente libro “Economía peruana y reformas estructurales. Diagnóstico, reflexiones, propuestas y la urgencia de relanzarlas”, nos entrega un excelente y oportuno trabajo para un Perú que no tiene margen para postergaciones, destinado a quienes quieren gobernarlo.
Marthans convoca voces muy cualificadas de la Escuela de Dirección de la Universidad de Piura para un análisis integral y profundo de los grandes cuellos de botella que impiden que nuestro país traduzca su estabilidad macroeconómica en bienestar real. Desde la inseguridad creciente, la informalidad crónica, la baja calidad educativa y la fragmentación e ineficiencia de la salud pública hasta el deterioro institucional y la desconexión entre política y gestión.
El diagnóstico queda claro: sin reformas estructurales, el modelo económico peruano seguirá navegando entre el éxito macro y el fracaso social. Este valioso libro, de gran claridad, precisa formas y caminos posibles incluyendo experiencias internacionales exitosas. Es un llamado a políticos, empresarios, periodistas, académicos y ciudadanía, para que salgamos del inmovilismo y evitemos llegar a una democracia vacía, sin legitimidad ni futuro. El aporte de Marthans y sus colaboradores es más que oportuno, las reformas estructurales deben volver al centro del debate.
No basta con prometer más gasto o nuevas leyes. Es urgente reorganizar el Estado. Bienvenida esta brújula para encontrar el rumbo. Tenemos demasiado diagnóstico y estamos saturados de voces críticas pero propuestas hay muy pocas. Estamos ante un conjunto de ellas de enorme calidad y solvencia. Gracias y felicitaciones.