ALIANZA EN UNA NUEVA RUTA
Por: Wladimir González Rojas.
La noticia más importante del fútbol peruano del momento es el triunfo de Alianza Lima, al superar de visita al campeón del fútbol paraguayo Libertad, por dos goles contra uno, que bien pudo inclusive ser por tres.
Es noticia porque se sale de una mala racha de 11 años de participación en la Copa Conmebol Libertadores, sin conocer un triunfo. Entonces cabe reflexionar sobre este hecho, porque de lo contrario podría entenderse como algo fortuito, casual o un golpe de mucha suerte.
Creo que el resultado de ayer solo confirma que por fin, se están haciendo las cosas bien y cuando ello ocurre, acompañan los resultados, no solo como equipo de fútbol sino como institución deportiva.
Una junta de acreedores denominado Fondo Blanquiazul y un manejo muy profesional en lo administrativo, pareciera ser el eje principal de lo que va logrando la entidad victoriana.
De seguir por esta misma ruta, Alianza Lima está en condiciones de seguir sumando mejores y mayores resultados deportivos e institucionales que lo ubiquen como el mejor en el deporte peruano y, consecuentemente generar mejores y mayores satisfacciones a sus fieles seguidores e hinchas de todo el país y del exterior.
No pretendo sobre dimensionar absolutamente nada, por el contrario, solo decir que este triunfo en Copa Libertadores tiene la dimensión de confirmar que el trabajo serio y esforzado en todos los niveles de la institución aliancista están dando resultado y servirá de acicate y de tal satisfacción de quienes son sus conductores para no bajar la guardia.
Y, muy por el contrario, renovar el espíritu de trabajo y de buena voluntad a fin de seguir brindando sus mejores esfuerzos para situar al equipo de sus amores en el sitial que le corresponde; por su tradición y por su historial de haber legado al fútbol peruano una pleyade de grandes y eximios jugadores que pasearon sus excelencias futbolísticas por los campos deportivos de nuestro país y del mundo.
En lo futbolístico se confirma que el binomio comando técnico y jugadores han asumido y consolidado un nivel de confianza y compromiso mutuo que se siente y se revela en la cancha. Los jugadores están dispuestos a dejar el último suspiro -si es posible- para defender su proyecto, sus metas personales y del equipo, llevados de la mano de un comando técnico joven que dirige Guillermo “Chicho” Salas.
Esta alegría aliancista debe ser la alegría del fútbol nacional, en la misma medida que nos alegra el empate de Universitario de Deportes, que en una reacción magistral pudo remontar un escore adverso con mucha garra y pundonor, como también nos entristece las derrotas de otros equipos como Cristal, Melgar y Vallejo.
Los buenos resultados elevan el prestigio de nuestro alicaído fútbol peruano; por lo tanto, todos somos una misma camiseta, todos somos Perú, cuando nuestros equipos nos representan en torneos internacionales. Salvo mejor parecer.