“EVO MORALES PERDIÓ TODO EL RESPETO DE LOS BOLIVIANOS”
El gobernador de La Paz, Santos Quispe, tilda de ‘cobarde’ al expresidente porque ‘está haciendo mucho daño al país. El diputado Walthy Egüez, señaló que los bolivianos se han quitado la venda de los ojos y que es inevitable la próxima desaparición del MAS.
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El expresidente de Bolivia, Evo Morales Ayma, pierde su poco capital político y electoral que le quedaba, al ser duramente cuestionado por sus antiguos partidarios que lo ven como un operador del castrochavismo que ha dividido al MAS por su actitud caudillista y autoritaria para con los militantes de la organización que lo llevó al poder.
El gobernador de La Paz, Santos Quispe, afirmó que “ya nadie respeta” al expresidente Evo Morales de quien dijo que es un “cobarde” que le está haciendo daño al país, porque además “no tiene palabra de hombre” pues solo busca volver a llegar a la presidencia y “eternizarse” en el poder.
Las palabras del gobernador se dan después de la polémica suscitada en Potosí, cuando una autoridad de Uncía arrojó el asiento donde debía sentarse Morales en un acto público, porque Morales intentó imponerse a las autoridades locales para politizar un evento cultural.
OTRO DESAIRE
A poco de celebrarse el aniversario cívico de la ciudad de El Alto, el ejecutivo de la Central Obrera Regional (COR) de esta urbe, Marcelo Mayta, indicó que se decidió no invitar a Morales, a los actos celebratorios quien, además, fue declarado persona no grata.
“Durante su Gobierno, él no asistía a las fiestas de aniversario, prefería viajar durante esas fechas; segundo, lo consideramos persona no grata porque ha abandonado al Estado en 2019 y nos dejó huérfanos; tercero, la crítica constante al Gobierno del presidente (Luis Arce). Esas son las tres razones por las que las organizaciones decidieron hacerle a un lado”, indicó Mayta a la prensa local.
DESINTEGRACIÓN DEL MAS
Las críticas contra el exmandatario también tienen que ver con su insistente injerencia en los asuntos internos del Perú, país que lo declaró persona no grata y le prohibió el ingreso al territorio nacional, al acusarlo de utilizar a sus operadores para azuzar a la población de Puno y proponer la independencia de esta región y su anexión a Bolivia.
Señalan que a Morales se le falta el respeto por dividir el MAS en distintas facciones, una de cuyas manifestaciones fue cuando uno de los eventos políticos acabó en sillazos entre los grupos y el repudio al aludido dirigente.
El diputado por Creemos, Walthy Egüez, señaló que el rechazo al jefe del MAS por parte de dirigentes de sectores y regiones que anteriormente formaban parte de su militancia cautiva, quitan la venda de los ojos a los bolivianos y revelan la inevitable próxima desaparición de esta organización política.
“Las heridas que se han causado y que se están causando todo este tiempo está sacando la venda de los ojos a los bolivianos (…), el MAS está en la víspera de su muerte como partido político (…), es cuestión de tiempo para que el MAS se desintegre. Entre sus facciones divididas y plagadas de corrupción están divididos, esto hace difícil que se sostengan políticamente”, señaló el legislador cruceño.
En este sentido, Egüez afirmó que la desintegración interna del MAS hace que se falten el respeto y violenten abiertamente entre sus distintas facciones, por lo que lo ocurrido en Uncía no es un hecho aislado ya que en varios eventos políticos internos, se protagonizaron actos violentos con “silletazos de por medio”, recordó el legislador.
Recientemente, Evo Morales, jefe nacional del Movimiento al Socialismo fue rechazado públicamente por el secretario de Culturas de Uncía, Potosí, Martín Choque, quien botó la silla que iba a ocupar en un acto cultural local, acusándolo de dividir al departamento potosino e ignorar a sus organizaciones sociales.
Posteriormente, seguidores de Morales agredieron físicamente a la autoridad municipal provocándole todo tipo de lesiones, según denuncia de la víctima.