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A CONFESIÒN DE PARTE, RELEVO DE PRUEBA

Escribe: Francisco Diez Canseco Távara

de una u otra forma, Castillo y Cerrón siguen ligados y lo seguirán aún cuando fuere para una pequeña adenda en la Historia Universal de la Infamia

La expulsión, disfrazada de pedido de renuncia, de Pedro Castillo, aún Presidente de la República, de “Los Dinámicos del Centro” (oficialmente Perú Libre) es otro hecho sin precedentes que sin duda refleja hasta donde llegan la improvisación y el oportunismo de la dupla Cerrón-Castillo, cuya corrupta simbiosis política no queda rota por esta nueva maniobra.
El comunicado de “Los Dinámicos del Centro” (léase también Perú Libre)atribuye el pedido de renuncia al plagiario seudo profesor a su deslealtad con el partido y a que está implementando el “programa neoliberal perdedor” sin guardar consecuencia con el ideario y el programa marxista leninista de Perú Libre.
Lo primero es verdad: desde la escisión en el Congreso  por  la cual se crea la bancada Magisterial hasta el proyecto de formar hasta 2 partidos políticos reflejan cero lealtad de Castillo con la banda que lo llevó al Poder. Pero lo segundo es de dudosa procedencia considerando que, por sus visibles limitaciones e ignorancia, no es creíble que el susodicho pueda siquiera entender que es marxismo leninismo y mucho menos que significa neo liberalismo. Según Castillo, Saga Falabella es un monopolio y Tarapacá forma parte del territorio nacional.
Como precisa Lao Tse: la palabra es de plata pero el silencio es de oro. El comunicado de los “Dinámicos” prescinde en absoluto de acusación alguna de corrupción contra Castillo que es, a no dudarlo, una de las razones centrales por las cuales debe ser vacado o acusado constitucionalmente de inmediato. Claro, Vladimir Cerrón tiene una sentencia firme de la Corte Suprema por corrupción y una serie de graves denuncias y ,por algo, Perú Libre goza de una bien ganada chapa policial. La complicidad de estos otorongos es evidente.
Es probable que Cerrón esté jugando la carta de recambio de Dina Boluarte, la que también tiene una acusación constitucional en marcha pero no está tan quemada como el falso rondero y podría tener un tiempo adicional en el Poder para que los “Dinámicos” puedan seguir depredando los recursos del Estado que son de todos los peruanos.
Lo cierto es que, de una u otra forma, Castillo y Cerrón siguen ligados y lo seguirán aún cuando fuere para una pequeña adenda en la Historia Universal de la Infamia de Jorge Luis Borges.
Y, en todo caso, a confesión de parte, relevo de prueba.

(*) Presidente de Perú Nación
     Presidente del Consejo por la Paz

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