EL PROGRESISMO QUE BUROCRATIZÓ EL PERÚ Y FRENÓ EL CAPITALISMO
A inicios del nuevo milenio diversas proyecciones económicas señalaban que si el Perú seguía creciendo por encima del 5% anual hacia el 2021 –es decir, por el Bicentenario de la Independencia– podría alcanzar el ingreso per cápita cercano a un país en desarrollo. Como todos sabemos, llegamos a esa fecha permaneciendo como un país de ingreso medio, con un crecimiento debajo del 3%, con claras tendencias recesivas, y un aumento general de la pobreza. Desde la pandemia y el gobierno de Pedro Castillo incluso se retrocedió una década en la lucha contra este flagelo: pasamos de una pobreza de 20% de la población a una cercana al 30%.
La creación y multiplicación de “derechos” agranda el Estado