EMBAJADA EEUU EN PERÚ DIFUNDIÓ MENSAJE EN DEFENSA DE LA LIBERTAD DE PRENSA
La Embajada de Estados Unidos en Perú expresó ayer su apoyo a «la labor de los periodistas» y defendió la libertad de prensa subrayando que es «la base de una democracia saludable» y la igualdad de derechos, a la sazón; «uno de los temas principales» de su política exterior.
«La libertad de prensa es la base de una democracia sostenible. EE.UU. apoya la labor de los periodistas, quienes brindan información veraz y transparente al público»,
escribió la misión en su cuenta oficial de Twitter.
«Estados Unidos apoya la labor de los periodistas, quienes brindan información veraz y transparente al público», señala en su perfil oficial de Twitter la delegación diplomática estadounidense en Perú.
Agregó que «el respeto por la igualdad de derechos para todos es uno de los temas principales» de su política exterior.
Este mensaje en defensa de la libertad de prensa se da en una crítica coyuntura en la que los periodistas y medios de comunicación han denunciado una labor de permanente hostigamiento de parte del gobierno de Pedro Castillo, a quien la fiscalía investiga como presunto jefe de una «organización criminal», la misma que involucra a familiares, amistades y socios políticos.
Por su parte, tanto Castillo como sus seguidores argumentan que la prensa obedece a «intereses subalternos». Sin embargo, nunca han puntualizado qué supuestos intereses «defienden». El propio jefe del Ejecutivo, así como su primer ministro, ha acusado a un sector de la prensa y del Poder Judicial de haber forjado un «complot» en su contra para sacarlo del poder. Nada más lejano de la realidad.
La administración de Pedro Castillo se caracteriza por la improvisación, inexperiencia y el nulo manejo del aparato estatal. A la fecha, a 15 meses de gobierno, ha habido una alta rotación de ministros, 72 en total, básicamente por la poca preparación de los nombrados para dichos cargos. Por si fuera poco, cada semana se revelan nuevos escándalos de corrupción, la mayoría de ellos ligados directamente con gente del entorno personal del mandatario.
De ahí el malestar de los responsables del manejo gubernamental por los constantes destapes de corrupción que hacen los medios no oficialistas y los ataques abiertos cuando no impidiendo la labor de los hombres de prensa. El último caso polémico lo protagonizó, una vez más, el primer ministro, Aníbal Torres, quien fue duramente criticado por unas declaraciones en las que acusó a una periodista de ser «mala madre» y «mala esposa».
el respeto por la igualdad de derechos para todos es uno de los temas principales
Mensaje de la Embajada de los Estados Unidos
Como se recuerda, Torres lanzó estas expresiones el jueves pasado durante una actividad en el Palacio de Gobierno, donde aseguró que un «pequeño grupo de poder económico, que ahora tiene el poder mediático, tiene la manía de imputar todo lo malo que existe en el país al Pedro Castillo o a su Gobierno».
En concreto, el primer ministro criticó un informe periodístico de un programa de América Televisión y acusó a la presentadora del mismo de «manipular» y «aprovecharse del escaso conocimiento» de las personas del lugar donde se había hecho el reporte.
«Mala fe, mala entraña. Esa mujer que hace eso, esa mujer es mala madre, no puede ser buena madre, es mala esposa, no puede ser buena esposa, es mala hija, no puede ser buena hija, y si tiene hijos solamente está deformando a sus hijos». dijo.
La periodista en cuestión, Sol Carreño, respondió el pasado domingo a los ataques del primer ministro y el tema tomó protagonismo el lunes en las redes sociales, donde varios congresistas de diferentes tintes políticos, organizaciones feministas y gremios periodísticos repudiaron las expresiones de Torres y se solidarizaron con Carreño.
Ante la avalancha de críticas, el primer ministro insistió mediante un mensaje en Twitter en que el reportaje periodístico de América Televisión «falsea la verdad» y aseguró que «quien distorsiona la verdad no puede ser buena persona ni buen comunicador».
«Las críticas que hago contra ese sesgo ideológico a ciertas empresas de comunicación se enmarcan únicamente en ese contexto. No es ético tergiversar mis declaraciones con el único fin de atacar. Nuestro gobierno reafirma su lucha contra toda forma de machismo y discriminación», señaló.
Pedro Castillo, por su parte, sólo ha concedido en sus 15 meses de gobierno 3 entrevistas. No responde preguntas y se escuda en un doble discurso; uno en las plazas de lo pueblos que visita y otro para los medios afines. En el único tema que mantiene el mismo guion es en el de victimizarse permanentemente.