El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, expresó ayer su profunda preocupación frente a la «dramática escalada» de la ofensiva israelí que se registra en Beirut, la capital de Líbano, en las últimas 24 horas.
«El secretario general está profundamente preocupado por la dramática escalada de los acontecimientos en Beirut en las últimas 24 horas con los bombardeos de Israel. Todas las partes deben dar un paso atrás desde el borde del abismo, ya que ni el pueblo de Líbano ni el de Israel, ni la región pueden permitirse una guerra total», sostuvo
en una declaración, transmitida por su portavoz, Stephane Dujarric, en la que insta a «parar el ciclo de violencia ahora».
Mediante su declaración, Guterres reiteró asimismo su llamado «a un alto el fuego inmediato» en Gaza y la liberación de los rehenes retenidos por Hamás, desde los ataques sin precedentes del 7 de octubre de 2023 en suelo israelí, que activaron la guerra de Israel contra el grupo palestino en la Franja y el Hezbolá en el Líbano.
En las últimas horas, las fuerzas israelíes lograron matar al jefe del movimiento islamista libanés Hezbolá, Hasán Nasralá, en un bombardeo registrado cerca de Beirut. Con ello, se asestó un duro golpe al grupo proiraní y empuja a Líbano y a todo Medio Oriente hacia una profundización del conflicto.
Según se informó, el bombardeo israelí del viernes registrado en la periferia sur de Beirut destruyó decenas de edificios, obligó a cientos de personas a abandonar sus hogares y dejó al menos seis muertos, según un balance provisional de las autoridades libanesas. (Tomado de diversas agencias internacionales).