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INOLVIDABLE CLASE DEL RECUERDO

DESDE MI ESQUINA

Escribe: César ‘Chico’ Véliz

¡Qué emoción! De un momento a otro frente a mis alumnos de periodismo de hace 25 años en la facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad del Centro. Sentí la misma sensación que cuando apareció, hace 60 años, mi primera nota firmada en el diario Correo y quería gritar a la gente en la calle: esa información que usted lee la escribí yo, míreme.

 

La alegría de llegar a las bodas de plata

 

Ahí, sin más preámbulos, se levanta de su carpeta y me presenta, impecable, Guiliana García, mientras con rostros inquietos e interrogantes Elvis Cantorín, Ruth Jiménez, Elizabeth Gómez y Máximo Guerrero esperaban la noticia del día.

 

Los profesores de hace 25 años

 

CARNÉ DE PERIODISTA

Miré a todos y les dije con naturalidad que muy joven, casi niño, nació mi inquietud por el periodismo sólo para entrar gratis al estadio. Lucir el carné de periodista. La explosión de carcajadas no se hizo esperar.

 

Rostros de satisfacción durante la recepción en casa de Ruth Jiménez

 

Luego observé los rostros de Yakerine Barragán, Edith Villaverde y Ninoska Munguía se transformaban al momento de recordar años del terrorismo. Te liquidaban si portabas ese carné. Vladimir Bendezú que ya conocía un poco de esa historia, asistió a la homilía y se retiró por obligaciones periodísticas.

 

FRENTE AL REY PELE

Aún inexperto, logré acercarme al Rey Pelé en el estadio Nacional en 1964 pero, frente al ídolo mundial del fútbol, no supe qué preguntar. Me conformé con tocarle el hombro. Había fracasado.
El periodismo me puso frente a Mario Vargas Llosa, Pablo Neruda, escribir la vida y tragedia de gente desposeída de riqueza como la “loca” Victoria que paseaba su miseria por las calles de la ciudad implorando: “Regálame tu cafecito” y extendía una lata mugrienta ante la indiferencia de la sociedad.
Todos calladitos. Elenita Pacheco, Edson Mamani, Rocío Rodríguez, Marco Ríos, Rosa Sánchez y Maritza Benito parecían transformarse y viajar al pasado. Claro, conocieron a la “loca” Victoria y, a través de reportajes, a Simón Torres Páucar el “mata por gusto” a los ciegos pordioseros Modesta y Alfonso o al niño lustrabotas. Esas crónicas obtuvieron el premio nacional de periodismo.

 

Después de desfilar por la calle Real de Huancayo

 

Expuse la peligrosa misión de corresponsal de guerra de la Fuerza Aérea del Perú FAP en el alto Huallaga donde las balas sí mataban.
Luis Ruiz, Rocío Casallo, Carla Carrión, Franklin Cuevas, Rocío Soto y Mario Taype, miraban atentos e inquietos por preguntar como si se tratara de una conferencia de prensa. En resumen:  los jóvenes colegas precisos y elegantes en el programa académico al lado de sus profesores de antaño: Víctor Marín, Horacio Quispe, Carlos Prieto, Ela Camarena, José Vilcapoma y César Véliz.
Al finaliza se me acercó Yovana Quispe y, muy atenta, agradeció las valiosas experiencias y me entregó un valioso reconocimiento a nombre de su promoción 1998 que ya se ubica en un lugar de privilegio de mi casa.

 

DÍA DEL PERIODISTA

Hoy, Día del Periodista, recuerdo la gestión que me tocó cumplir en 1967. Ultimo año para construir la Casa del Periodista o se devolvía el terreno al donante Víctor Castellares. No se había hecho nada en 9 años anteriores.

 

El  1 de octubre de 1967 entregamos la  Casa del Periodista a la nueva directiva

 

Busqué el apoyo del Arq. Hugo Dávila que venía de graduarse en Brasil. Con su hermano el Ing. Rafael Dávila hicieron los planos. Un amigo me condujo a Lima. Gracias al carné de periodista hablé con el senador Ramiro Prialé. Me apoyó con fierros para toda la obra.
De vuelta a Huancayo con José Vega, tesorero, anotaba las donaciones en el Libro de Oro, y Óscar Piñas, secretario, pedimos ayuda al General EP. Diógenes Montenegro, alcalde Félix Ortega, rector de la Universidad Nacional del Centro, Nilo Arroba Niño, Julio Bonilla, obispo Jacinto Valdivia, salesiano Marco González y amigos personales. Se hacía realidad el sueño.

 

Al lado del arquitecto Hugo Dávila apoyamos José Vega y César Véliz

 

En menos de un año construimos una obra para la posteridad con apoyo de Huancayo y entregamos la Casa del Periodista a la nueva directiva el 1 de octubre de 1967. Feliz Día colegas.

 

 

Ceremonia de colocación de primera piedra de la Casa del Periodista

One thought on “INOLVIDABLE CLASE DEL RECUERDO

  • Máximo Guerrero Noroña

    Cono no recordar al gran “Chico Veliz” con su elocuencia y dotes magistrales, ante un auditórium de estudiantes ávidos de saber, de la formación y las enseñanzas de una personalidad en el mundo periodístico que abstraía a cada estudiante a un mundo imaginario de grandes historias verdaderas de la vida cotidiana, que se transformaban en noticias que seguro se convertirían en grandes titulares en los medios locales.
    Las mismas que en cada clase se convertían en secuencias didácticas para el análisis noticioso de los procesos de la comunicación, generando con ello debates apasionados de los estudiantes para ensayar sus primeros pasos como comunicadores en el mundo periodístico.
    ¡Que emoción! Es lo mismo que sentimos cuando después de 25 años nos volvemos a reencontrar y al igual que entonces escuchamos su clase magistral, que significó una viaje emocionante al pasado, en el que nuestros ímpetus estudiantiles nos hacían admirar sus grandes hazañas periodísticas, que estamos seguros hoy lo vemos con los ojos de la realidad gracias a sus enseñanzas.
    Un gran abrazo Maestro de tu alumno que cariñosamente llamas “El Gato”

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